La Dirección General de Impuestos (DGI) emitió un comunicado para señalar que tras una auditoría realizada la semana pasada, el 86% de 30 comercios visitados en el Casco Antiguo de San Felipe y el Causeway de Amador presentan "irregularidades" en materia tributaria.
"Si se está cobrando el Impuesto a la Transferencia de Bienes Muebles y Servicios (ITBMS) por el servicio que se está dando o el producto que se está vendiendo, el comerciante debe transferir ese dinero al fisco. Si no lo está haciendo, esa es una forma de defraudación fiscal, porque ese impuesto le pertenece al fisco", explicó María Elena Moreno, jefa del Departamento de Facturación de la DGI.
Tras detectar estas irregularidades, los inspectores levantaron actas de multa. En tanto, los comerciantes tendrán 15 días para apelar esta sanción.
"Si el comerciante no da factura, la multa va de mil a 5 mil dólares, en caso de ser primera vez, o de 5 mil a 15 mil dólares, cuando hay reincidencia, más el cierre del local de dos a 10 días. También hay sanción para el contribuyente que no exige su factura al local, equivalente al 7% de lo que se ha tenido que facturar o una multa de un balboa", añadió Moreno.
