Rusia y China vetaron este martes 28 de febrero, un proyecto de resolución de la ONU impulsado por Estados Unidos, Reino Unido y Francia para imponer sanciones a Siria por los ataques con armas químicas de 2014 y 2015.
La medida, que impone sanciones a once sirios y diez entidades, logró nueve votos a favor, pero China, Rusia y Bolivia se opusieron. Kazajistán, Etiopía y Egipto se abstuvieron. Para ser aprobadas, las resoluciones de la ONU requieren nueve votos a favor y ningún veto.
Esta es la séptima vez que Moscú veta una resolución para proteger a Damasco, su aliado. China, otro miembro permanente del Consejo de Seguridad y con derecho a veto, tomó la misma postura que Rusia en seis de esas ocasiones.
"La resolución es muy apropiada", dijo la embajadora estadounidense ante la ONU, Nikki Haley, tras la votación. "Es un día triste para el Consejo de Seguridad cuando algunos de sus miembros comienzan a excusar a otros Estados miembro que matan a su propio pueblo", añadió.
"Definitivamente el mundo es un lugar más peligroso", enfatizó. Unas horas antes de la votación, el presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió que no iba a apoyar la iniciativa. Estimó que las sanciones eran "inapropiadas" y que no ayudarían "al proceso de negociaciones, sino que interferiría y erosionaría la confianza".
La votación fue la primera gran reunión internacional de la nueva administración del presidente Donald Trump, quien dijo querer mejorar las relaciones con Rusia.
El embajador británico ante la ONU, Matthew Rycroft, dijo antes de la votación que los tres países que presentaron el borrador de resolución compartían el punto de vista de que los responsables de los ataques con armas químicas debían rendir cuentas. El apoyo a la resolución constituiría "un mensaje fuerte y claro (...) de que la comunidad internacional considera que el uso de esas armas horrendas es un asunto serio", comentó Rycroft.
El gobierno de Trump se unió con sus viejos aliados Francia y Reino Unido para enfrentarse a Rusia por su apoyo al régimen de Damasco. "Nos complace que la nueva administración estadounidense haya confirmado que comparte enteramente nuestros puntos de vista sobre esto, de modo que estamos listos para avanzar", dijo el embajador francés, Francois Delattre.
La votación tuvo lugar en momentos en que las negociaciones patrocinadas por la ONU en Ginebra para poner fin a la guerra en Siria enfrentan serias dificultades y el gobierno continúa con sus bombardeos aéreos a pesar del cese al fuego.
