Gustavo García de Paredes, rector de la Universidad de Panamá (UP), ingresó la tarde del miércoles, 12 de agosto de 2015, al pleno de la Asamblea Nacional, en medio de una ovación por parte de administrativos y profesores de esa casa de estudios, para comparecer sobre la Fundación Universidad de Panamá.
Fue acompañado de la ministra de Educación, Marcela Paredes de Vásquez, y autoridades de la UP.
De inmediato, le dieron cortesía en el recinto parlamentario para que empezara a responder un cuestionario de nueve preguntas.
El rector empezó a resumir la creación de la fundación. "En 1995, 38 síndicos se reunieron con el deseo de establecer esta fundación, y me pidieron que presidiera esa reunión, y ahí se determinó la junta directiva... a partir de ese momento quedé totalmente separado", dijo.
Desde entonces, agregó, la fundación comienza su papel de apoyo a la UP.
La relación con la Universidad, agregó, se basa en el "principio de legalidad administrativo", establecido por medio de un convenio.
Y el rol de la fundación, sostuvo el rector, es agilizar las investigaciones y seminarios en esa casa de estudios superiores.
Dijo que esta entidad privada ayuda a que se le pague, por ejemplo, a expositores extranjeros que dictan un diplomado, y se agilizan las investigaciones, ya que "con la burocracia" que hay en la Universidad se tardarían esos pagos.
Añadió que "el presupuesto universitario no pasa a la fundación... son dineros extrapresupuestarios los que van a la fundación".
Dicho ente cobra un 10% de los fondos que administra.
"La Universidad ha sido atacada sin misericordia, injustamente", se quejó García de Paredes ante los diputados, mientras los administrativos lo aplaudían desde las gradas.
Una investigación de este diario reveló que las autoridades de esta casa de estudios desvían fondos públicos a una fundación privada.
En estos momentos la Contraloría le realiza una auditoría a la Universidad de Panamá.




