Se nos ha consultado acerca del uso y significado de los enunciados “Realizó que lo estaban calumniando” y “Esperaba ansiosamente la secuela de esa película”.
Nuestra respuesta:
La Academia Panameña de la Lengua aclara que las palabras “realizar” y “secuela” son propias del español, pero que algunos usos (específicamente a los que nos referimos a continuación) se deben a la influencia del inglés y al poco conocimiento que tienen algunos hablantes del español (incluidos los instruidos).
Estos usos deben ser evitados. La forma verbal “realizar” para dar a entender que alguien “se da cuenta de algo” es censurable y se deben emplear en su lugar las formas “percatarse de”, “darse cuenta de ”, “caer en la cuenta de ” “dar en ello”, etc.
Es cada vez más común escuchar usos incorrectos como este: “Ellos aún no han realizado que la derrota se debió a…”, “Tan ingenuo es que no realizaba que le estaban tomando el pelo”.
Las formas correctas (dichas en español) serían: “Ellos aún no se han dado cuenta de que la derrota se debió a...” y “Tan ingenuo es que no se percataba de que le estaban tomando el pelo”.
En cuanto a la palabra “secuela”, cuyos significados son “consecuencia o resulta de algo. || 2. Trastorno o lesión que queda tras la curación de una enfermedad o un traumatismo, y que es consecuencia de ellos”, el lenguaje periodístico –especialmente el dedicado al cine y en menor cantidad el de la música-, nos ha transmitido insistentemente el sentido de “continuación de una serie, película, edición”.
Algunas películas que nos ofrecen las compañías filmográficas tienen, en efecto, una segunda parte o una tercera, etc. Es decir, la continuación o las segundas partes de una película o de una serie no son secuela de la primera versión, sino, extensión de ellas o, simplemente, segundas, terceras o cuartas partes.
Como corresponde resaltar los usos correctos para los efectos de emplear el idioma en su propiedad y en su precisión semántica, cabe advertir que son las enfermedades o los traumatismos los que dejan secuelas, es decir, trastornos, consecuencias.
Por ejemplo, una convulsión puede dejar secuelas.
También (y por extensión) las dictaduras, los procesos, los sucesos trascendentales, etc. dejan secuelas, efectos. Es decir, que los períodos inflacionarios, las revoluciones, los modos de actuar colectivamente, las crisis sociales, culturales, económicas, políticas o ideológicas dejan huellas, marcas, vestigios que son, siempre, el resultado de un hecho precedente.
La Academia dice: Evite los usos de “realizar” y “secuela” para referirse a “darse cuenta” y “segunda parte o continuación de una película”. Siempre es preferible emplear “realizar” con su sentido de “efectuar”, y al querer expresar “darse cuenta” o “percatarse”, no debemos confundirlo con realizar en su traducción del inglés.