Llegó el verano y los niños están de vacaciones. Algunos padres para esta época buscan actividades para mantener a sus pequeños ocupados y divertidos, pero no encuentran qué pueden hacer.
Las opciones son variadas. En Panamá hay diversas academias y centros que ofrecen clases de baile, canto, piano y otras actividades que tienen como fin enseñar y desarrollar diferentes habilidades en el niño.
También hay opciones ambientales con las que además de divertirse el niño podrá aprender y conocer la naturaleza.
Jarissa Reina, encargada de Mercadeo del Parque Natural Metropolitano, explica que este ofrece actividades que divierten al niño y le enseñan a cuidar y proteger el medio ambiente.
A partir del 12 de enero en el Parque comenzarán los cursos con temas como “El detective del bosque”, “Re-usa, reduce y recicla”, “Pequeñas plantas en un gran bosque (musgos y líquenes)”, “Teoría del vuelo: observación de aves”, y “En búsqueda de huellas”. Con esos talleres, dice Reina, los niños entre 6 y 12 años aprenden, de manera interactiva, a reconocer la importancia del bosque.
El Parque Municipal Summit ofrece talleres ambientales, como “Sembrando vida”, “Descubre tu lado salvaje”, “Explorando la naturaleza”, “Colores en vuelo”, y “Aliados de la conservación”.
Esos cursos serán dictados del 2 al 6 de febrero, para niños entre 8 y 12 años.
Otra opción es el Centro Natural Punta Culebra del Instituto Smithsonian, en Amador, que ofrece a sus visitantes un museo al aire libre, en el cual se pueden observar animales marinos.
Para los niños hay tours en los que se les enseña la importancia de los recursos marino costeros, la protección de los animales marinos y su rol en el ambiente.
Pero, además de participar en talleres, esta es una época propicia para realizar también actividades al aire libre, como practicar deportes y pasear. Lo importante es que el niño se divierta sanamente.




