A simple vista, que un bebé esté “rellenito” es considerado una señal de buena salud. Sin embargo, estudios demuestran que el sobrepeso en el primer período de vida puede causar enfermedades crónicas.
Un estudio realizado por la Universidad de Harvard y el Children’s Hospital de Boston, publicado hace aproximadamente un mes, revela que los niños que nacen con mucho peso tienen más riesgo de convertirse en adultos obesos.
Otro estudio, del Hospital sueco Malmö, concluye que los bebés que al nacer pesan más de 8.8 libras son 33% más propensos a desarrollar artritis en el futuro.
También preocupan los resultados de un estudio realizado por el Hospital Pediátrico de Filadelfia, que indica que los bebés que engordan rápidamente tienen más posibilidad de ser personas con sobrepeso décadas después.

