Una vez más, Britney Spears ha decidido un nuevo giro. Si antes pasó de ídolo adolescente virgen a vampiresa del sexo, ahora es el tiempo de cambiar pañales.
La cantante pop y su marido, Kevin Federline, están esperando su primer hijo, anunció la artista el martes en su página web. Con ello, la pareja puso fin a semanas de especulaciones de la prensa del corazón estadounidense acerca de un posible embarazo.
"Hubo informaciones acerca de que estuvimos el fin de semana en el hospital, y Kevin y yo queremos decirles que todo está bien", señala Spears en la internet. No se conocen, sin embargo, otros detalles, como la posible fecha de nacimiento.
Para la cantante se trata de la primera vez, pero Federline ya tiene dos hijos con su ex novia Shar Jackson. Cuando conoció a Britney su relación con la madre de sus hijos ya había terminado, aseguró hace un año. El niño más pequeño nació en julio pasado y Spears y Federline se casaron sorpresivamente en septiembre.
Para ese momento, la "princesa del pop" ya tenía tras de sí un matrimonio anulado, sellado en enero de 2004 con su amigo de la infancia Jason Alexander en Las Vegas. La boda fracasó en una noche y el enlace fue anulado tras 55 horas.
Spears y Federline se conocieron en abril. "Después de besar a un par de sapos, al fin tengo a mi príncipe", declaró la cantante a la revista People. Federline había participado previamente en shows del ex novio de Spears, Justin Timberlake.
Enseguida después de su segunda boda, la artista hizo saber que adora a los niños y que quería formar pronto una familia. "Quiero ser una madre joven", profetizó. En noviembre comunicó que haría una pausa laboral para prepararse para la maternidad.
Para hacer frente "a esos constantes rumores", ambos crearán un reality show sobre su "historia de amor", anunciaron la semana pasada.
