Iván Barrios inauguró el Movistar Music Fest 2006 sobre el escenario más grande que se ha traído a Panamá.
Su público, aunque algo distante, aplaudió y movió las caderas con los éxitos del artista, que tocó solamente unas cuatro canciones.
Media hora después, Os Almirantes entró a escena con un único objetivo: poner a saltar a los asistentes, que en vez de aplaudir, golpeaban globos fosforescentes.
A un costado, los mejores exponentes del Extreme Bike volaban por los aires y en las pausas, los Djs de algunas radioestaciones panameñas competían por el premio al más gritón.
Imposible es que Coti deje indiferente a cualquiera. A pesar de no tener muchos éxitos en la parrilla radial, el cantautor argentino ofreció un concierto que gustó a niños, jóvenes y adultos.
La 5a. Estación tocó los hits radiales que lo han hecho conocido en Panamá. El público estaba contento —por ellos, por los que venían, por los que ya habían tocado, por todo— y lo agradeció coreando las canciones que incluyeron clásicos del ‘pop’ español y otros temas de antaño.
Miranda! presentó uno de los mejores ‘shows’ de la noche: vestuario colorido, dominio total del escenario, música divertida y fresca. Los argentinos armaron un repertorio preciso y regalaron una coreografía bailada por sus mismos integrantes. Al final, los asistentes se dieron el gusto de gritar junto a Miranda! "es la guitarra de Lolo".
A medianoche, Moenia hizo un recorrido por lo mejor de su carrera electrónica, incluyendo un tema tributo a Caifanes y éxitos de su última producción discográfica. Esta era la despedida de su gira promocional.
Luego de más de una hora de espera y con la espalda y piernas paralizadas, pero con la misma energía que había a las seis de la tarde, Jaguares comenzó su espectáculo con canciones de Caifanes, mezcló temas de sus inicios con canciones de su disco y no dejó que el público dejara de saltar, gritar y cantar en toda la noche.
A las 3:00 a.m., Saúl Hernández seguía cantando, aún no se presentaban los ocho disc jockeys de música electrónica, pero nadie parecía tener ganas de que la fiesta terminara.

