Daniel Day-Lewis nunca figura en las revistas de chismes, aparece muy poco en televisión y rara vez concede una entrevista. El escurridizo actor solo puede ser visto en pantalla, y eso también es poco frecuente. En la última década ha hecho solo cuatro películas.
Cada vez que participa en una, se sumerge en una profunda investigación.
Entonces Day-Lewis vuelve a desaparecer. El actor está de regreso con There Will Be Blood, un filme que sigue al petrolero Daniel Plainview a medida que hace crecer su negocio y pierde la razón en California a fines del siglo XIX.
