El niño de cuatro años, Edgar Hernández, considerado el primer caso de gripe A en México y que sobrevivió a la enfermedad, fue inmortalizado con una estatua de bronce que será colocada en el pueblo donde vive para atraer turistas a la zona.
La estatua del “Niño cero”, que lleva una rana en la mano como símbolo de una de las plagas bíblicas, fue realizada por el escultor Bernardo Luis Artasánchez, quien viajó a La Gloria, en Veracruz, para convivir con el niño, de cuatro años.
La efigie, de 1.30 metros de altura y 154 libras, se elaboró a petición de las autoridades, que la colocarán en el poblado para simbolizar la victoria sobre el virus A(H1N1) y atraer turistas.
La figura muestra a “un niño que se curó y que representa la unión de todos los mexicanos” frente a este problema, dijo Artasánchez.
El escultor es autor también de una estatua del ex presidente mexicano Vicente Fox (2000-2006), que en 2007 fue derribada por una muchedumbre en el municipio de Boca del Río.
Se espera que en los próximos días sea desvelada la estatua, que se integrará en el programa de promoción turística de esa comunidad rural que las autoridades impulsan a través del sitio web www.lagloria.gob.mx.
