Arqueólogos peruanos descubrieron en el barrio limeño de Miraflores una tumba de una autoridad de la cultura prehispánica wari con tres niños de unos dos años momificados.
En el mismo lugar descubrieron también seis unkus (atuendos sagrados de algodón y colores diversos), además de maíz, frijoles y algodón.
La arqueóloga Cristina Verde explicó que la tumba se encontró intacta dentro de la Huaca Pullana, un cerro ceremonial de la cultura lima (entre 200 y 700 d.C.), pero por su forma, profundidad y antigüedad pertenece a la cultura wari.
La cultura wari es originaria de Ayacucho, 575 kilómetros al sureste de Lima, en el corazón de los Andes peruanos, y se desarrolló entre los años 500 a 1000 después de Cristo, al expandirse por el norte hasta los departamentos de Cajamarca y Lambayeque, y por el sur hasta el Cuzco y Moquegua.
Esta civilización se conoció por sus hábiles guerreros, que desarrollaron un sofisticado orden religioso, militar y urbana, además de un gran conocimiento de la metalurgia.

