En el imaginario de Hollywood son bastante distintas aquellas películas sobre hípica que las relacionadas directamente con caballos, aunque en una y en otra trama esté involucrado ese majestuoso mamífero.
Visto así, de acuerdo a la página de internet imdb.com, se han hecho entre 1950 y 2011 diez películas en Estados Unidos expresamente vinculadas con el deporte de la hípica.
Mientras que en ese mismo período se han rodado 30 películas relacionadas exclusivamente con caballos en la llamada Meca del Cine.
Del primer colectivo, aquel que tiene como protagonista la pasión, los riesgos y los triunfos dentro de la hípica, la mejor producción de acuerdo al sitio rottentomatoes.com es Un día en las carreras (1937), del director Sam Wood y la destacan con un 100% de su calificación (es decir, entra en el nivel de obra maestra).
Esta comedia la lideran los fabulosos hermanos Marx, en la que Groucho, Harpo y Chico se hacen pasar por veterinarios y expertos apostadores del negocio de las carreras.
Del segundo grupo, el mejor calificado por la página web filmaffinity.com (con 6.3 de un escalafón de 10) fue el drama Dreamer (2005), dirigido por John Gatins, sobre cómo un padre (Kurt Russell) y su hija (Dakota Fanning) mejoran su relación familiar a la par que salvan a un caballo herido de una de sus patas.
Secretariat (2010), de Randall Wallace (Cuando éramos soldados, 2002 y El hombre de la máscara de hierro, 1998), está a medio camino entre una película sobre hípica y una dedicada a los caballos.
Para los críticos de rottentomatoes.com la tercera película firmada por Randall Wallace merece un 64% de su apoyo, es decir, entra en el aparte de regular.
En tanto, Secretariat no es que le fue mejor cuando le tocó opinar a los lectores de rottentomatoes.com, ya que le dieron un 78% de sus preferencias.
Secretariat es sobre un caballo veloz que ganó la Triple Corona, aunque en el fondo su mayor impacto dramático es plantear cómo una dama con intuición y seguridad (interpretada por Diane Lane) puede vencer a cualquier retrógrado.
Visto así, Secretariat es la clase de producción que si se hubiera estrenado en la década de 1960 hubiera sido una bomba social, ya que plantea cómo las mujeres son capaces de enfrentarse a cualquier reto y prejuicio, pero lanzarla ahora es reiterar algo tan obvio que hasta los machistas aceptarían esa verdad.

