El comediante y roquero estadounidense Jack Black afirmó en Ciudad de México, donde presenta la cinta Los viajes de Gulliver, que quiere hacer más películas como productor y que no le gustaría terminar sus días como “un payaso”.
“Eso espero, mantenerme trabajando como actor y no convertirme en un payaso, y estar involucrado en proyectos de televisión y de cine como productor”, expresó.
Black es el protagonista y productor asociado de Los viajes de Gulliver, de Rob Letterman, basada en el clásico de la literatura fantástica de Jonathan Swift y se encuentra en México para promocionar su lanzamiento en el país, el 23 de diciembre, y dos días después en toda América Latina.
En esta moderna versión del clásico, que cuenta también con las actuaciones de Jason Segel y Emily Blunt, el regordete Black es un gigante que irrumpe con sus ocurrencias en un país habitado por diminutos seres.
Es la segunda ocasión que el protagonista de la película Escuela de rock visita México por motivos de trabajo.
El actor y músico produjo y actuó en la película Nacho libre en 2006, una extravagante historia de luchadores, con la actuación de la mexicana Ana de la Reguera y filmada en Oaxaca, uno de los estados con más pobreza en el país.
Black reconoció que es criticado porque sus casi todos personajes son parecidos. “No soy como Al Pacino o Robert de Niro. No soy un actor que se transforme, pero siempre trato de hacer algo diferente en cada película”, dijo.
En el plano musical, Black, que toca la guitarra en su propia banda Tenacious D, dijo que pronto sacarán un nuevo disco de rock-cómico, por supuesto.
Entre sus próximos proyectos, Jack Black doblará al personaje principal de la película de dibujos animados Kung Fu Panda 2.

