La obra contagiosamente optimista de James Rizzi, uno de los exponentes más relevantes del pop art estadounidense, ha desembarcado en Berlín en un estallido de alegría y colores estridentes.
El Museum für Kommunikation de Berlín expone hasta el próximo 1 de febrero más de 200 obras del artista neoyorquino, un optimista convencido que mira la vida eufórico, lucha contra la resignación y busca arrancar una sonrisa en aquel que observa su obra colorista.
Una aureola happy invade dos de las plantas del museo berlinés, que acoge la muestra después de que Rizzi haya diseñado para Deutsche Post, la compañía alemana de correos, cuatro sellos que están a la venta por un dólar.
Nacido en 1950 en Brooklyn, el artista tiene en Alemania su segundo mayor mercado, en donde comercializa su obra desde hace 20 años a través de la galería berlinesa Art Galerie Richter, tal y como señala a Efe su representante, Sabine Zuberbier, quien apunta que el éxito de la obra de Rizzi se explica por “la felicidad que inspira”.
Sus lienzos, asequibles a muchos bolsillos, se venden desde los 215 dólares, aunque el más caro asciende a 200 mil dólares.
“Lo mejor de todo es que uno puede venir a ver sus obras y llevarse una a casa”, afirma Zuberbier, quien subraya el marcado carácter personal que imprime el autor a cada uno de sus proyectos.

