Un robot, experto en matemáticas, resuelve el problema del Cubo Rubik, usando manos de metal para dar vueltas al colorido juguete.
Un robot panda usa sensores para detectar cuando las personas están riendo, y se une a las carcajadas. Un estudiante de odontología examina la boca de un nuevo paciente: un robot con aspecto humano que cuenta con dos relucientes filas de dientes.
Japón mostró sus nuevos robots en la Exposición Internacional de Robots 2007, en la capital nipona.
El robot que sirve para entrenar dentistas, y bautizado Simroid, por simulator humanoid, o simulador de aspecto humano, tiene piel y ojos que parecen de verdad, y una boca llena de dientes. Los estudiantes pueden examinar y pasar el torno por la boca. Un sensor colocado donde están los terminales nerviosos de los dientes envía una alerta, un quejido del robot, cuando el estudiante se pasa de la raya con el torno."¡Ay, eso duele!" gritó una robot, cerrando sus ojos mientras el aprendiz de dentista usaba el torno. "Ahora me siento mejor", dijo la robot.
En otro quiosco el robot Míster Cube, usó sensores de color incorporados y un par de diestras manos para resolver el acertijo del Cubo Rubik.

