Berlín contará durante tres meses con una exposición de litografías y grabados de Salvador Dalí, que desde un punto de vista pedagógico y comercial intenta acercar la vida y obra del genio del surrealismo "a todos los públicos", explicó ayer el organizador de "Dalí-La exposición", Carsten Kollmeier.
"Nuestro reto es que todos los que se acerquen -y que no frecuenten museos normalmente- encuentren aquí algo de Dalí que les entusiasme", dijo el promotor de esta exposición privada, que lleva seis años viajando por Alemania y finalmente llega a Berlín.
Salvador Felipe Jacinto Dalí (1904-1989) fue un maestro de la autopromoción, como queda patente en esta muestra que ha reunido trescientas obras del forjador de ilusiones y fantasía, entre los que destacan sus primeras litografías con las que ilustró la edición parisina de Don Quichotte de Joseph Foret en 1957.
Las series de dibujos o grabados, en su mayoría procedentes de coleccionistas o particulares franceses, se alternan con las tres portadas de la revista de mayor tirada en Alemania, Der Spiegel, que en 1959, 1960 y 1984 dedican su tema principal al artista de Figueras (España) y no siempre lo tratan con guantes de seda.

