La música ha sido la fiel compañera de Ana Lucía y Patricia Elena Vlieg, artistas que desde niñas han vencido obstáculos por no contar con el sentido de la visión. Aun así, su talento para la música y su fortaleza interior las ha llevado a cosechar los frutos que hoy comparten.
La pasada noche del martes, en el Teatro La Huaca del Centro de Convenciones Atlapa, Ana Lucía Vlieg Paulin cantó y viajó a través de la letra de su primera producción titulada Llamados, un canto a la esperanza, acompañada en el teclado y bajo la dirección musical de su hermana, Patricia.
Con la apertura del concierto a las 8.00 p.m., el público recibió un mensaje de fe y motivación conforme la cantautora interpretaba temas como Palabra Viva, Qué quieres que haga por ti, Déjame sentir que estás aquí y Llamados.
"Estas letras testifican las buenas nuevas y el propósito de un llamado que el Maestro tiene para usted", así lo expresó Ana Lucía, mientras en su rostro se dibujaba la pasión de su canto eclesiástico. Esta velada fue un regalo de cumpleaños para Patricia Elena.

