Son muchos los mitos que giran alrededor de la celebración de la Semana Mayor. Siempre hay gente que vive y respeta las creencias, como es el caso de Carlos Miguel Quintero, de 80 años. "Cuando estaba pequeño mis abuelos me decían que no me bañara en el río porque me podría convertir en pez".
Recuerda que su mamá no lo dejaba subirse a los palos porque se convertiría en mono. "Son creencias que hasta cierto punto no es que uno se convierta en pez o en mono, sino más bien las interpreto como un respeto a la muerte de Cristo y que si alguien las desafía, algo le puede suceder", manifiesta Quintero.
Por ejemplo, menciona que hace muchos años, él le dijo a su yerno Domingo, un Sábado de Gloria, que no fuese al monte a trabajar, pero este no le hizo caso y se fue con el machete al hombro; de repente lo vio regresar con un brazo herido. Tenía una herida profunda y sangraba mucho. Quintero dice que allí es donde está "la enseñanza de respetar los días santos".
Otro de los mitos en que las personas mayores, sobre todo del interior del país, creen mucho, es en la "rejera" que le dan a los árboles el Viernes Santo.
Según Quintero, cuando un palo de mamón o de mango no tira fruto, "uno se levanta el Viernes Santo lo más temprano que pueda, sin ver ni hablar con nadie y le da un par de rejazos al árbol, y tenga por seguro que al siguiente año pare".
—¿Usted ha tenido alguna experiencia?
"Claro que sí. Tenía un palo de mamón que nunca echaba fruto, y no dudé en hacer esta práctica y me resultó. Ahora el palo echa mamón hasta por los codos", aseguró.
Yolanda de Lau, oriunda de Santiago, Veraguas, dice que siempre escuchó hablar del árbol de granadillo, el cual es muy visitado para el Jueves y Viernes Santo, porque es "milagroso".
"Un día me animé a visitarlo, sentí en el lugar tranquilidad, paz y armonía, quizás por la multitud de gente con fe que había concentrada alrededor del árbol con velas encendidas", dijo.
El árbol está ubicado en La Trinidad, corregimiento de Las Guacas, distrito de Río de Jesús. "Tira una flor blanca muy parecida al papo, la cual es utilizada para el reumatismo y la artritis".
El Jueves y el Viernes Santo los creyentes se reúnen al rededor de esta árbol para venerarlo y pedirle mediante la mediación de Dios que los cure.
Lo curioso de este árbol es que sólo florece para el Jueves y Viernes Santo.
"Ha habido personas que han intentado sembrarlo en otros puntos de la geografía nacional, sin embargo no ha pegado" concluye Lau.

