BOSTON, EU/ APCuando Jerry Conlogue supo que Polaroid dejaría de producir sus películas de revelado instantáneo, su preocupación fueron sus momias. Conlogue usa película Polaroid cuando viaja a las selvas peruanas para tomar fotos de rayos X de momias antiguas para no tener que transportar las sustancias químicas del revelado.
Ahora él y otros entusiastas que usan esa película para propósitos artísticos o industriales se preguntan qué harán. "Estamos descorazonados", dijo Con- logue, codirector del Instituto de Investigación Bioantropológica en la Universidad Quinnipiac en Hamden, Connecticut.
Polaroid Corp. anunció la semana pasada que proyecta cerrar las fábricas en Massachusetts, México y Holanda que producen los formatos de película para usos industriales e individuales. La película instantánea estará disponible en los comercios hasta el año próximo. Mientras tanto la empresa —que dejó de fabricar las cámaras instantáneas en los dos últimos años— busca un socio para la adquisición de derechos de licencia, con la esperanza de que otra firma siga produciendo la película instantánea y mantenga los suministros disponibles.
Algunos entusiastas que todavía usan Polaroid están tratando de comprar todo lo que pueden.
La película instantánea de Polaroid sigue usándose en la era digital para aplicaciones industriales. Por ejemplo, en medicina, los dermatólogos la usan impresa con un cuadriculado para medir la reducción de las cicatrices con el tiempo, dijo Michael Phelan, gerente de ventas de Calumet Photographic en Cambridge que atiende a clientes de fotografía industrial.
En EP Levine, una casa de fotografía en Boston, la venta de película instantánea y regular ha disminuido con el advenimiento de la fotografía digital. Pero aún hay demanda de película instantánea. "Mantendremos el inventario hasta el final porque hay gente que lo desea", explicó Jay Callum, presidente de la firma. "Pero es difícil imaginar el negocio de la fotografía sin que Polaroid sea parte de él".
