La inminente apertura del testamento de Mario Benedetti, fallecido el pasado 17 de mayo, aparece cargada de controversias. El semanario local, Búsqueda, indicó que el hermano del escritor, Raúl Benedetti, se considerará “único y universal heredero” del poeta uruguayo.
Sin embargo, el asesor legal de la Asociación General de Autores de Uruguay (AGADU), Eduardo de Freitas, afirma que fue designado por Benedetti “albacea” (administrador) de su sucesión, como recogió el semanario.
“Yo hablaba con él y conozco perfectamente lo que hacía”, aseveró De Freitas, quien apostilló: “Es inminente que se obtenga el certificado del Registro de Testamentos y la comprobación testamentaria para que yo pueda presentar la sucesión”.
En este contexto de especulaciones, la Jefatura de Policía de Montevideo adoptó la disposición de custodiar el apartamento donde el poeta vivió hasta su muerte e impedir la entrada de cualquier persona, incluida la de su hermano, según varios medios uruguayos.
Esos allegados apuntaron también que la voluntad de Mario Benedetti era que su hermano presidiera la fundación que, según anunció el pasado 20 de mayo a Efe, llevará su nombre y continuará su labor en las áreas de la cultura y los derechos humanos.
La Fundación Mario Benedetti contará entre sus patronos con el autor uruguayo Eduardo Galeano, el músico Daniel Viglietti y el periodista Juan Cruz , entre otros.

