La edición francesa de El Principito, del escritor Antoine de Saint-Exupéry, cumple sesenta años con el récord de ser el libro más traducido de la historia de la literatura y una referencia para pequeños y mayores de todo el mundo.
Publicado inicialmente en Estados Unidos en 1943, donde el autor se había refugiado de la invasión nazi de Francia en la II Guerra Mundial, El Principito es el libro francés más vendido en el mundo (unos ochenta millones de libros) y se han hecho entre 400 y 500 ediciones.
Además, es la obra literaria más traducida, en concreto a unas 160 lenguas o dialectos, desde el aranés al amazigh (bereber), pasando por la última de ellas, el xhosa, una de las once lenguas oficiales de Sudáfrica.
Según los expertos en su obra, Saint-Exupéry (1900-1944) tenía en mente el personaje de El Principito desde hacía tiempo y en sus dibujos de los años 30 se suele encontrar un personaje con el cabello tieso, vestido con una larga capa y rodeado de estrellas.
No fue, sin embargo, hasta 1942 cuando Saint-Exupéry se decidió a escribir un libro sobre este joven, al sugerirle el editor estadounidense Eugéne Reynal que lo convirtiese en el héroe de un cuento infantil tras ver un dibujo en una servilleta del restaurante neoyorquino donde almorzaban juntos.
Seis meses después nació El Principito, que tres meses más tarde la editorial Reynal y Hitchcock publicó en Estados Unidos, en versiones en francés e inglés.
Una semana después, Saint- Exupéry, que luchaba como piloto de aviación, partió a una misión al norte de África de la que nunca regresó.

