El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) protestó en Berlín contra las capturas accesorias y las toneladas de peces desperdiciados que se arrojan ya muertos al mar con una performance submarina en la piscina municipal del barrio de Schönefeld.
Seis bailarines subacuáticos, con el cuerpo casi desnudo y recubierto de pintura a semejanza de distintos animales, escenificaron bajo el agua el sufrimiento de los seres que quedan atrapados en las redes pesqueras.
Según explicó la responsable de pesca de WWF Alemania, Karoline Schacht, un tercio de las capturas anuales en el Mar del Norte son “tiradas por la borda, como si fuera basura” por tratarse de ejemplares demasiado pequeños o para cuya pesca no tienen licencia los barcos.
“Esas prácticas tienen graves consecuencias económicas, medioambientales y científicas y contribuyen a aniquilar las reservas naturales de Europa”, explicó.
Según Schacht, 3.3 millones de tiburones y más de 300 mil ballenas y delfines fallecen cada año por ese tipo de capturas.
La organización reclama que la Unión Europea ponga en marcha un programa de acción en contra de las capturas accesorias, prohíba verter al mar los animales descartados, fije nuevas zonas protegidas y obligue al sector pesquero a usar sistemas de pesca más selectivos.
