Quise salirme un poquito de la concepción que he tenido habitualmente de Del Prado en la Avenida Argentina, como una sanduchería-cafetería, e hice unos descubrimientos meritorios.
Pero primero probé un par de emparedados y, sí, siguen siendo buenos, ya sean en pan de la casa, como mi "Especial Manolo" que se distingue por venir pintorescamente coronado de una rebanada de tomate colmada de mayonesa, y por traer cuanto encuentra el cocinero: salami, jamón, pierna y quesos mozzarella y amarillo. El otro fue un emparedado de filete también muy sabrosón, con suficiente filete como para no sentir que uno come solamente pan.
Luego, vinieron los descubrimientos de los platos fuertes: una corvina al ajillo estuvo singularmente buena, sin la salsa coagulada que le ponen en muchos establecimientos, pero recubierta de ajitos finamente picados y mezclados con pimentones, cebolla, creo que un poquitín de apio, en fin… sabrosa y muy criolla.
Lo siguiente que probé fue un pollo "a la parmesana" de lo más peculiar. El menú lo describe como un "bistec" de pollo (léase medio pollo deshuesado) viene empanizado y luego colmado de jamón y queso mozzarella, con una salsa de tomate muy peculiar que deja el plato teñido de amarillo, como si tuviera achiote. No obstante, tiene buen sabor y un toquecito de dulce que le viene bien porque la composición, en su integridad, se pasa de sal. Decidí, entonces, probar algo de mariscos y pedí un pulpo a la gallega, lo que fue un garrafal error: estaba tan duro que si David no hubiera encontrado piedritas, bien le hubiera podido meter un biombazo de pulpo a Goliat e igual le sacaba el ojo. Pero los dos siguientes platos redimieron absolutamente al pulpiche: uno, el arroz con langostinos es absolutamente divino, con buena sazón pero sin empalagar y con mucho vegetal: zanahoria, petit pois, pimentón rojo y verde, apio, cebolla y mucha cebollina. Es como un cruce entre una paella y un arroz frito chino, o sea, prácticamente epitomiza la amalgama de cocinas étnicas en un género muy nuestro. El segundo plato, las almejas a la marinera, es otro ejemplo de esto, aunque un poco más español: trae una salsa algo azafranada, caldosa y, además de los vegetales del guiso muy similares a los del arroz (solo faltaron los petit pois), trae trocitos de calamar, muy tiernos. De postre probé el "delicias de coco", y pedimos dos jugos. Dixit.
FICHA TÉCNICA
• COMIDA: Muy sabrosa
• SERVICIO: Atento
• AMBIENTE: Cafetería
• PRECIO: Menos de $15 o $25
• RECOMENDADO: Arroz con langostinos ($12.50)
• RELACIÓN COSTO-CALIDAD: Bistec de pollo a la parmesana ($8.50)
• ACCESO A DISCAPACITADOS: Acera
• FUMAR: Terraza
• HORARIO: 24 horas todos los días
• DIRECCIÓN: Vía Argentina, frente al Banco General
• TELÉFONO: 264-2645
• ACEPTAN: Visa, American Express, Master Card y Clave

