La silla, más allá de su función utilitaria para el descanso y alivio de los seres humanos, ha sido objeto de la creatividad de muchos genios a lo largo de los tiempos. Sí, aunque ante los ojos de un simple mortal no parezca.
Pocos de los grandes diseñadores, arquitectos e incluso artistas de los siglos XIX y XX se han resistido a la tentación de experimentar en este campo del diseño de sillas, aplicando nuevas tendencias, tecnologías y materiales del momento.
Por estos días, y hasta noviembre, el Museo Franz Mayer, ubicado en México, está presentando la muestra "100 años, 100 sillas" que incluye una selección de los más sobresalientes ejemplares fabricados en la última centuria.
La gran mayoría de las piezas fue traída de Alemania, Suiza, Reino Unido y Francia, entre otros países de Europa.
Los visitantes podrán, por supuesto, ver la peculiar muestra, pero no les estará permitido sentarse sobre ella.
