La televisión china está plagada de reality shows imitando el estilo de American Idol u Operación Triunfo, y uno de ellos, llamado La Gala de las Canciones Rojas, ha logrado mezclar con gran éxito este formato de concurso televisivo con la propaganda comunista, según contó la prensa estatal.
El concurso, al que se apuntaron 100 mil cantantes aficionados de entre nueve y 80 años, celebró varias finales televisadas en las que los participantes debían demostrar sus dotes para la música entonando clásicas canciones revolucionarias, compuestas durante los años del comunismo más ortodoxo de Mao Zedong. Los telespectadores del canal de Jiangxi, desde donde se emitía para el país, podían votar por sus concursantes favoritos vía móvil, y algunos de los participantes obtuvieron hasta 400 mil votos. El concurso, grabado en las antiguas bases revolucionarias de Jiangxi, quiso aprovechar el éxito de concursos de canciones pop como Supergirl o Superboy, que auparon a la fama a jóvenes cantantes chinos al estilo de Operación Triunfo.
