A veces, la vanidad cobra su precio. En el caso de las mujeres, el uso de tacón alto y puntiagudo como calzado ha logrado multiplicar por 10 las operaciones en los pies, resumieron especialistas en el Segundo Congreso Internacional de Cirugía Mínimamente Invasiva de Pie y Tobillo, que se llevó a cabo a finales del pasado mes de abril en España.
Las mujeres, al volverse “adictas” al tacón, pueden llegar a sentirse incómodas si caminan descalzas o con zapatos bajos, explica el ortopeda Roque Pinilla.
El uso de tacón a largo plazo, sin embargo, conlleva la retracción de los elementos alrededor del tobillo, como lo son ligamentos, cápsulas y tendones, indica.
Las molestias de este tipo, según Pinilla, pueden manifestarse con la ruptura del tendón de Aquiles.
Además, el ortopeda Salomón Dayan comenta que el uso de un calzado no adecuado “aumenta la predisposición a los juanetes”.
