Cuando la profesora asociada de la Universidad Autónoma de Barcelona, Mónica Martínez Mauri, realizaba en Costa Rica estudios de antropología, escuchó hablar de los kunas y le pareció muy interesante su sistema de autonomía política.
Posteriormente, realizó su tesis doctoral titulada: "De Tule Nega a KunaYala. Mediación, Territorio y Ecología en Panamá, 1903-2004", que presentó esta semana en la Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero.
En este trabajo, reflexiona sobre los cambios en la idea de territorio, "teniendo en cuenta la mediación política que ejercen los individuos o las organizaciones como las ONG y sobre la idea de cómo en esas ideas de territorio y esas mediaciones interfiere la ecología", explica Martínez.
En los últimos años, los pueblos indígenas han vuelto sus discursos muy ecológicos, afirma.
"Hablan mucho de la madre tierra y, a veces, ese discurso va acompañado de una idea de territorio como sinónimo de tierra", comenta Martínez, explicando que "si nos interesamos en la cosmología indígena, sabemos que la noción de territorio es mucho más compleja que la idea de tierra, y eso es lo que pretende dar a conocer esta tesis.
De ello, la especialista aclara que la idea de territorio se debe entender desde un punto de vista amplio, incluye tierra, agua, aire, muchas cosas.
Durante dos años, Martínez estuvo en la comunidad de Cartí realizando su trabajo de campo, aprendiendo a hablar como sus pobladores, a dormir en hamaca, a comer tulemasi y a valorar la paciencia de las mujeres que le enseñaron todo, hasta su lenguaje.
Recientemente y en conjunto con dos antropólogos, comenzó a estudiar el impacto del turismo en Kuna Yala, con fondos de la Secretaría Nacional de Ciencia y Tecnología y de National Geographic.
