Los impresionantes lienzos de Neo Rauch, uno de los pintores alemanes más cotizados del momento, pueden verse en una amplia retrospectiva sobre los últimos trece años de su obra en el Museo de Arte de Wolfsburg (centro) que lleva por título "Nuevos papeles. Pinturas desde 1993 hasta hoy día".
Neo Rauch, de 46 años, ha participado directamente en la selección de los 74 lienzos y una escultura que ocupan 2 mil 500 metros cuadrados del "Kunstmuseum" de Wolfsburg.
"Sólo hemos elegido obras que pintó a partir de 1993 porque las anteriores, que hizo durante sus estudios (en la Escuela de Leipzig) fueron una suerte de experimentación", explicó el comisario de la muestra, Holger Broeker.
El simbolismo industrial, la figuración pictórica, el romanticismo alemán, la estética comunista, el surrealismo, el cómic y el manierismo de Leipzig son algunos de los elementos que confluyen en la obra de Rauch, un artista difícil de encasillar y que reconoce beber de muchas fuentes.
El mismo pintor reconoce en sus obras "elementos de Vermeer, Tintín y el pato Donald".
De ahí que sus lienzos coloridos, inmensos fascinan y abruman al espectador.