La historia debe recordar por siempre a un hombre que plasmó con sus manos esculturas que perdurarán en la sociedad panameña.
Si cree que exagero, mencionaré unas cuantas y le aseguro que las reconocerá: Monumento a Albert Einstein; el busto de Juan B. Sosa en Panamá La Vieja; el monumento a Manuel F. Zárate, en Guararé; el busto del Dr. Héctor Conte Bermúdez, en Penonomé y el monumento a San Juan Bosco en la barriada que lleva ese nombre.
Carlos Arboleda, escultor, pintor y grabador panameño, es el dueño de estas obras.

