Los europeos descubrieron la Psidium guajava (guayaba) al llegar al Caribe (se cree proceden de Perú), y con el tiempo llegó a Asia hace unos 300 años, donde se estableció y de donde volvió la Perla a estos litorales bajo el paraguas de cooperación internacional.
Además de la P.guajava, hay otras variedades: la brasileña, P. cattleianum, o strawberry y la Cattley o P.littorale. Es rica en vitaminas A y C, potasio y fibra.
Además de ser un postre popular acompañada de queso –ya sea el tradicional queso crema o el de su elección— en forma de pasta o cascos, es muy sabrosa en repostería: desde los cañones de guayaba hasta el cheesecake con guayaba, etc., o como relleno de tortas y dulces. Pero también se puede usar en comida de sal, y es un ingrediente delicioso para las barbacoas.
Para hacer cascos, pele las guayabas, sáquele las pepas; pase las pepas por un tamiz para separarlas de la pulpa mucilaginosa que las rodea y añada esta última a los cascos con azúcar y unas cucharaditas de agua, cocínelas a punto. En el Recetario aparece mi versión del glaze de guayaba.
