La iridología es considerada una técnica para diagnosticar los grados de inflamación o afectación en los diversos tejidos, organismos y glándulas del ser humano. ¿La razón? Según el doctor en naturopatía Omar Moreno, la vinculación que tiene el iris del ojo con los centros nerviosos del cuerpo hace que cualquier trauma que afronta una persona quede registrada en la mirada.
La conexión convierte el iris en un radar corporal que anota en la mirada lo que no funciona en el cuerpo, mostrando signos como rayas, decoloraciones o manchas en el ojo.
Explicó que esta técnica se puede hacer de forma análoga utilizando una lupa y linterna o digitalmente tomándole una fotografía de ambos iris a la persona, y pasar la imagen a un sistema de escaneo computacional que divide las partes del iris de acuerdo con qué área del cuerpo está conectada.
En el ojo derecho se puede observar como marcha: el cerebro, el oído, la laringe, la hipófisis, el esófago, la tiroides, el estómago, el hígado, la vejiga y el colon. Y en el izquierdo: los riñones, las glándulas suprarrenales, el útero o la próstata, los ovarios o testículos, la piel, las mucosas, sangre y el sistema linfático.
El examen podrá indicar qué parte del cuerpo sufre o está por sufrir algún problema, sin embargo no indicará qué enfermedad se está padeciendo exactamente.
Moreno agregó que el paciente debe tener referencias del iridólogo que lo atenderá y solicitarle sus títulos aprobados.
Por su parte, el médico general Fernando Taboada dijo que esta técnica se puede utilizar como un diagnóstico base, siempre y cuando el paciente termine atendiendo el problema específico con un especialista del área afectada.
