El Parlamento nipón aprobó una ley básica que pretende afrontar con medidas estatales y locales la oleada de suicidios de 100 mil personas al año que hace de Japón el país con la mayor tasa de este tipo de muertes del mundo industrializado, según cifras de la Organización mundial de la salud (OMS).
La nueva normativa refleja la alarma social desatada en Japón tras el vertiginoso aumento de determinados tipos de suicidios, como los llamados "pactos de la muerte" por internet, en los que varias personas se ponen de acuerdo para morir juntas.
La norma insta a los gobiernos locales a trabajar codo con codo con el Estado para aplicar las medidas preventivas necesarias en el sistema educativo, en los puestos de trabajo y en otros sectores de la sociedad nipona.
Además, urge a realizar más investigaciones y estudios sobre la prevención de los suicidios, y a incrementar las oficinas de atención psicológica y médica.
La ley promueve la asistencia a los supervivientes y a los familiares de personas muertas al atentar contra su propia vida.

