Ahora que poco a poco nos vamos a dedicar de cuando en vez a escribir acerca de nuestras provincias, le toca nuevamente el turno a la de Colón.
Portobelo, Nombre de Dios, Chagres, son algunas de sus poblaciones de las cuales principalmente vamos a tratar.
Comenzando por el orden anterior, tenemos que esa comunidad se fundó el 2 de noviembre de 1502 y fue bautizada como Portobelo, ya que Colón uso su lenguaje nativo, el italiano, para nombrarla. En la primitiva localidad Francisco Valverde Mercado fundó lo que se conoció como San Felipe de Portobelo.
Felipe II, el monarca español, en 1584 ordenó que fueran trasladados los moradores de Nombre de Dios, ya que encontraba que gracias a esa mudanza mejores frutos iban a lograr.
Tomando en cuenta lo ambicionado que para piratas y aventureros era aquel lugar, el monarca arriba citado dio inicio a los trabajos para fortificarlo, para lo cual hizo construir los castillos que respondieron a los nombres de San Felipe, Santiago de la Gloria, San Jerónimo y San Cristóbal, algunos de sus restos aún se pueden admirar. Sin embargo, gran parte de sus materiales desaparecieron, ya que la avaricia y la ladronería de su principales habitantes era mayor que la de los piratas que constantemente merodeaban por allí.
Chagres fue el nombre que, tomado del río, se adoptó para llamar a otra de las localidades a las cuales nos dedicaremos hoy.
Río de los Cocodrilos fue como en un principio se le llamó a esa corriente de agua. Lope de Olano, otro conquistador español, lo efectuó.
Para 1527, el curso fluvial fue recorrido por Hernando de la Serna y Pablo Cargo.
Tras el descubrimiento de las minas de oro y de plata en el Perú fue también mucho lo que se pudo obtener del transporte por allí, pero no todo era de envidiar. Francis Drake, el pirata, en 1573 se apoderó de una cantidad de oro hoy sin igual en aquellos lugares. Fue por eso que Henry Morgan, en 1670, utilizó a uno de sus subalternos para seguir con los saqueos. El almirante Vernon y varios otros aventureros ingleses tampoco se olvidaron y continuaron con el saqueo. Para 1752 las fortalezas se reconstruyeron.
Nombre de Dios, fundada a fines de 1519, fue en realidad el verdadero primer poblado que los españoles construyeron allí.
“En el Nombre de Dios” fueron las palabras con la que originalmente Diego de Nicuesa nos dejó para bautizar el lugar que descubrió.
También Diego de Albula tuvo que ver con todos estos movimientos.
Negros, blancos e indios se encargarían de poblar el lugar.
Todo aquello fue motivo de cambios constantes. Nuestros primitivos conquistadores, movidos por la abundancia de oro y otras muchas riquezas, hicieron que la ambición y el afán de prosperar fueran la tónica de la época y del lugar.
Desde el punto de vista histórico, Portobelo es una localidad que siempre tendremos presente. Lo que es una lástima es que no haya tenido el desarrollo económico y habitacional acorde con lo que representó su pasado. Es por ello que nunca nos cansaremos de traérsela a ustedes hasta acá.En cuanto a las fotografías, hoy les presentamos una vista aérea del valioso, en todo sentido, castillo de San Lázaro. Además, una panorámica de la localidad. También les presentamos a Nombre de Dios, una foto que tal como se puede apreciar es muy antigua, como nos suele gustar.
