Panorámicas vistas y trabajadas desde todo ángulo; libres y abiertas a todas las posibilidades. Cosmovisiones cargadas de desafíos personales y de sonidos propios. Música, saxofón y percusiones.
El óleo, la madera y los lienzos son algunos de los recursos que el panameño Antonio Imbert utiliza para construir o deconstruir sus imágenes desérticas o sus selvas recargadas de realismo.
Para él, todo se centra en un proceso que puede ir en reversa o hacia adelante y que no le permite encerrarse en un solo "estilo" o categoría, sino que le da el espacio para pintar y crear más allá o más acá del horizonte académico. Al aire libre, pero en tres partes.
YO, ELLO Y SÚPER YO.
Para Imbert, cuya inspiración más importante ha sido el maestro Alfredo Sinclair, la primera parte de su obra "es el paisaje mirado desde un punto de vista realista, lo que cualquier persona interpreta o entiende como tal: Ah, un paisaje" y listo. Algo así como el "súper yo", si se estuviera hablando del subconsciente, si Freud estuviera mirando los cuadros de Imbert.
El segundo espacio, en el medio, haciendo equilibrio entre uno y otro, aparece "el yo", la intervención y cierta abstracción del paisaje, "mi propia interpretación" dice el artista, a la que incluyó elementos poco convencionales. Pura textura.
Finalmente, el "ello" de la muestra sería la serie de trabajos en maderos y óleos, donde predominan rojos, verdes y luces fosforescentes. Pedazos de árboles que Imbert recogía de los madereros.
ALMA Y CEREBRO
"Soy panameño, placa 8, marea roja", resume sobre sí Antonio Imbert.
Una marca propia, algo de escepticismo, la búsqueda de aquella raíz que se extienda libremente por donde le plazca, por los cientos de genes diferentes que lo conforman.
Comenzó a pintar "en serio" algo tarde, confiesa, a los 24 años. Pintaba, había ganado concursos infantiles, "pero eso nunca se cultivó".
Decidió dedicarse a la música —estudió en el Conservatorio— y fue a través de ella y de su relación color/sonido que comenzó a pintar todos los días, disciplinadamente y hasta el día de hoy, sin parar.
Finalmente se graduó de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Panamá.
Imbert ha expuesto individualmente en República Dominicana, España y en el patio. Ha sido parte de una larga lista de colectivas que data del año 1991.
SOBRE SU EXPOSICIÓN
Esta nueva muestra se inaugura el viernes 21 de abril, a las 7:30 p.m. y está patrocinada por Edu Art Gallery y el hotel El Panamá, lugar donde se llevará a cabo.
Además de su más reciente obra, se proyectarán trabajos anteriores. El propio Imbert pintará una pieza en vivo e interpretará algo de música.