El bichón maltés es una de las razas caninas más antiguas; se han hallado estatuas que la representan en tumbas egipcias del siglo XIII a.C. Durante la Edad Media ya se había convertido en compañero habitual de la nobleza europea. Desde entonces, su popularidad no ha disminuido.
Es un perro de compañía que requiere ejercicio moderado y adora la vida familiar. Por su manejable tamaño, es muy adecuado para la vida de ciudad, ya sea para la casa o ideal para apartamentos.
Descripción
Sus ojos son oscuros y vivos y el cuerpo corto, bien proporcionado y musculoso. Orejas largas y colgantes. Cola curva, muy gruesa en la base pero fina en la punta y cubierta de pelos largos y abundantes. Pelaje largo, liso y sedoso de color blanco uniforme.
Es elegante y con una constitución que le permite un desplazamiento que está caracterizado por una rápida secuencia de movimientos de las extremidades.
Se diferencia por su carácter tranquilo, que nunca se pone en evidencia con manifestaciones de "histeria".
Cuidados
El pelaje requiere el empleo diario de un cepillo suave y de un peine que mantengan en orden el abundante pelo.
Los instrumentos para el arreglo del pelo deben ser lavados en una solución desinfectante e insecticida.
En el maltés, como en otros perros de pelo blanco, se acentúa con la edad una variación de color rosa-marrón alrededor de los ojos, en el perineo y las axilas. Un examen médico establecerá si es alguna infección o un problema estético.
