En 2009, 2 mil 433 panameños perdieron su vida a causa de tumores malignos, es decir, no salieron vencedores de la lucha contra el cáncer.
Datos de la Contraloría General de la República revelan que de aquellos luchadores mil 322 eran hombres y mil 111 eran mujeres.
Estos 2 mil 433 panameños se unen a los más de 7 millones de personas que cada año pierden su vida en las manos de esta despiadada enfermedad, según la OMS. Solo en Estados Unidos más de 600 mil personas mueren de cáncer por año.
El cáncer es un término genérico para un grupo de más de 100 enfermedades que puede afectar el organismo, y que se produce por el crecimiento desordenado y, generalmente, muy veloz de las células de un órgano del cuerpo, al punto que puede invadir zonas adyacentes de la parte originalmente afectada y diseminarse.
Muchas de sus causas de su aparición siguen siendo un misterio, pero es un hecho que factores de riesgo como la herencia, la presencia del virus del papiloma humano, la ingesta de sustancias tóxicas como alcohol y cigarrillos y hábitos de comida inadecuados pueden activarla. Por ello, es tan importante la prevención.
Aunque cuando se trata de cáncer no hay un manual o guía que se aplique a todos los tipos, Alex Juncá, cirujano oncólogo del Instituto Gorgas, sintetiza sus consejos en llevar una vida sana.
Recomienda ejercitarse durante 30 minutos por lo menos 3 veces a la semana, llevar una dieta balanceada –baja en grasa y exceso de azúcar–, y evitar los tóxicos.
Más específicamente, señala que es recomendable que las mujeres se hagan mamografías cada dos años a partir de los 40, y cada año a partir de los 50. Y en el caso de los hombres, que se realicen el examen de próstata una vez al año.
Aunque exista la percepción general de que la mayoría de los tipos de cáncer son hereditarios, lo cierto, destaca Juncá, es que las medidas mencionadas moderan y disminuyen los riesgos de padecerlo.
Las revisiones médicas periódicas son recomendables, ya que permiten ofrecer tratamiento temprano. Cuando un paciente ya presenta síntomas –pérdida de peso, lunares que cambian de color, sangrado– significa que el mal ya se ha desarrollado, explica el oncólogo, ginecólogo y obstetra Jorge Lasso de la Vega.
Sobre prevención de cáncer de mama, Lasso de la Vega recalca que estudios recientes revelan que el autoexamen (evaluación por parte de la propia paciente) parece no ser eficiente.
En la lucha contra el cáncer, la anticipación y prevención son las mejores aliadas.
