Joseph Barbera fue repartidor en una sastrería, trabajó en un banco y hasta dio unos pasos en el mundo del boxeo, pero se decantó por los dibujos, un arte en el que dejó una huella imborrable.
Barbera empezó a publicar sus trabajos en algunas revistas y probó suerte en algunos estudios de Hollywood, hasta que en el segundo lustro de la década de 1930 se unió al equipo de animación de la Metro-Goldwyn-Mayer (MGM). Allí conoció a William Hanna, con quien formaría uno de los dúos de animación más exitosos de la historia.
Su primera serie con gran aceptación fue Tom y Jerry, cuando empezaba la década de 1940 y se dedicaron a ella por 17 años hasta que, en 1957, los estudios de animación de la MGM fueron cerrados, con Barbera y Hanna de directores, reseñó la BBC News.
El dúo no tardó en proseguir con lo que mejor sabía hacer. Cuenta la historia que, después de pasar el trago amargo de la MGM, crearon una compañía que con el tiempo se conoció como Hanna-Barbera Productions.
Fue entonces cuando el talento de Barbera con los trazos y los guiones de Hanna dieron vida a Los Picapiedras, Tom y Jerry, Huckleberry Hound, Don Gato, Johnny Quest, La Hormiga Atómica, Scooby-Doo, Tiro Loco McGraw, El Oso Yogi y Los Supersónicos.
Se calcula que juntos, y bajo el paraguas de su propia compañía, crearon unas 100 series animadas, según datos de la CBS.
Se estima que Los Picapiedraas, con el ¡yabba dabba doo! de Pedro, fue su trabajo más popular.
Claro, lograrlo no fue fácil. Cuando Barbera y Hanna quedaron en la calle y decidieron hacer su trabajo de forma independiente, el presupuesto no era para nada cómodo.
Para minimizar costos, en lugar de usar 14 mil dibujos para un capítulo de siete minutos de algunas de sus invenciones, usaban solo 2 mil, detalla la BBC News.
Pero convirtieron esta necesidad en un estilo que se conoció como “animación limitada”. Fue la base de futuras series animadas muy exitosas como Los Simpson y South Park, detalla un artículo del New York Times.
Luego de estar involucrada en varias transacciones, la productora Hanna-Barbera fue vendida en 1991 por 320 millones de dólares a Turner Broadcasting System. Hasta ese año Hanna y Barbera estuvieron al frente de la empresa como presidentes.
Hanna murió el 22 de marzo de 2001. El deceso de Barbera, en tanto, fue el 18 de diciembre de 2006. Tenía 95 años.
“Espero que la gente me recuerde como el creador de varios personajes cálidos, divertidos y amados, los cuales puedan hacer que todo mundo sea feliz y sonría”, dijo Barbera en 1997 durante una entrevista emitida en Archive of American Television.
