Apelando a la paciencia para demoler una muralla, España se impuso por 1-0 a Irán este miércoles en Kazán, dejando encaminada la clasificación a los octavos de final tras disputarse la segunda fecha del grupo B del Mundial de Rusia 2018.
Diego Costa, a los 54 minutos, marcó el único gol del partido en el Kazan Arena, al que acudieron 42 mi 718 espectadores.
Con este resultado, Portugal y España lideran la zona con 4 puntos, mientras que Irán tiene 3 y Marruecos, prematuramente eliminado, acumula dos derrotas sin puntos.
Los clasificados a la siguiente etapa se decidirán el próximo lunes, cuando España enfrente a Marruecos en Kaliningrado y la Portugal del astro Cristiano Ronaldo se mida con Irán en Saransk.
Comandado por la habilidad de Isco y Andrés Iniesta, España se hizo del control del juego apenas sonó el pitazo inicial imponiendo su ritmo y buen manejo de la pelota.
No iba a ser extraño que la Roja inclinara la cancha y asumiera el mando del partido gracias a la buena movilidad de sus jugadores y su característico toque en corto, como tampoco que Irán cerrara filas atrás hasta con ocho hombres para proteger su arco.
Así jugó hasta los 54 minutos, cuando Costa rompió la resistencia iraní gracias a una habilitación del "cerebro" Iniesta, un gol que pone a España merecidamente con dirección a los octavos de final.
El delantero reconoció que tuvo un "poco de suerte" en el gol que anotó.
"Sabíamos que teníamos que tener paciencia y esperar el momento exacto", afirmó el delantero hispano-brasileño sobre el planteamiento defensivo de los asiáticos.

