El Sevilla, defensor del título, consiguió la clasificación para los octavos de final de la Liga Europa gracias a su victoria 3-2 en el terreno del Borussia Mönchengladbach alemán, este jueves en la vuelta de los dieciseisavos.
Ese resultado confirmó la ventaja de 1-0 que habían logrado los españoles en la ida, hace una semana en la capital andaluza.
Por dos ocasiones se adelantó el Sevilla en la primera mitad en el Borussia Park, gracias a los tantos del colombiano Carlos Bacca (minuto 8) y Jesús Vitolo (26), pero los germanos equilibraron sucesivamente, por medio del suizo Granit Xhaka (19) y del belga Thorgan Hazard (29).
El partido llegó al descanso con 2-2 y en la segunda mitad el Borussia Mönchengladbach quedó con uno menos en el 69 por la expulsión de Xhaka, cuando su equipo todavía tenía que marcar dos goles para remontar la eliminatoria.
Los locales se fueron rindiendo ante la dificultad del reto y el Sevilla aprovechó en la recta final para, de nuevo mediante Vitolo (79), sellar una nueva victoria.
El Gladbach, tercer clasificado en la Bundesliga, plantó una gran batalla pese a sus dos derrotas en este equilibrado pulso, pero el Sevilla supo acertar en los momentos claves.
El equipo de Unai Emery, con el deber cumplido y que este viernes conocerá el rival de los octavos de final (12 y 19 de marzo), se centrará en la liga española, donde es quinto a 5 puntos del cuarto lugar del Valencia, el último de la zona de acceso a la próxima Liga de Campeones.
VILLARREAL AVANZA
El Villarreal, con un doblete de su jugador argentino Luciano Vietto y un tanto final del mexicano Giovani Dos Santos, se impuso por 3-1 este jueves en el terreno del Salzburgo austríaco y selló su clasificación para los octavos de final de la Europa League.
El Submarino Amarillo había ganado por 2-1 en casa en el encuentro de ida de los dieciseisavos.
GUARÍN CLASIFICA AL INTER
El Inter de Milán se impuso por 1-0 en casa a un Celtic de Glasgow con diez, gracias a un solitario tanto de su hombre de moda, Freddy Guarín, este jueves en la jornada de vuelta.
El colombiano permitió a la hinchada interista respirar aliviada con su gol en el minuto 88. Hasta entonces los escoceses soñaban con la hazaña después del 3-3 de la ida en Glasgow, que les permitía estar a un tanto de la clasificación.
Ese gol de Guarín certificó la clasificación del Inter para la siguiente ronda ante un Celtic que había empatado en la ida en los minutos finales.
Esta clasificación, sumada a tres victorias consecutivas en la Serie A, confirma el buen momento del equipo de Roberto Mancini.
“Estamos atravesando por un buen momento. Necesitábamos alegrías. Lo pasado no cuenta, está olvidado. Ahora hay que pensar en el domingo porque tenemos un partido muy importante (ante Fiorentina)”, declaró Guarín.
Liverpool cae en penaltis ante Besiktas
El Liverpool, uno de los grandes nombres del torneo, quedó eliminado este jueves en los dieciseisavos de final de la Europa League, tras perder 1-0 en su visita al Besiktas y caer luego 5-4 en la tanda de penaltis.
Un tanto de Mario Balotelli en los últimos instantes había dado una ventaja provisional a los Reds tras el partido de ida, pero en la vuelta el equipo de Estambul fue más fuerte en el estadio Atatürk de la ciudad del Bósforo.
El Liverpool se enfrentaba a un ambiente hostil, con 70.000 aficionados que animaban sin cesar al Besiktas en el infierno turco.
El único gol del partido lo consiguió en el minuto 70 Tolgay Arslan, asistido por el atacante senegalés Demba Ba.
Esa victoria 1-0 envió el duelo al alargue, donde el marcador permaneció inalterable, por lo que se tuvo que llegar a la resolución por penales.
Con empate 4-4 en esa tanda, Arslan acertó para el Besiktas y el croata Dejan Lovren envió alto, sellando la eliminación del equipo de Brendan Rodgers, víctima ilustre de estos dieciseisavos de final.
El Liverpool se hundió por lo tanto en un estadio que le traía buenos recuerdos, ya que fue allí donde logró, en 2005, el último de sus cinco títulos europeos, en una final en la que levantó tres tantos en contra ante el Milan italiano.
Uno de los héroes de aquel equipo de hace diez años, Steven Gerrard, no estuvo por lesión y al Liverpool pareció faltarle un talismán para no naufragar en su desplazamiento a Turquía.
El equipo de Anfield había llegado a la Europa League rebotado desde la Liga de Campeones, donde había sido tercero de su grupo tras Real Madrid y Basilea, lo que le había impedido acceder a octavos.
Ahora tendrá que olvidarse de las competiciones europeas y pelear en la Premier League, donde es séptimo, a cinco puntos del cuarto puesto del Manchester United, que marca el límite de la zona de clasificación para la Liga de Campeones.






