Desde la concentración de la Selección de Panamá en el hotel Coclé, el director técnico Thomas Christiansen habló este martes sobre el enfoque del equipo de cara al inicio de las eliminatorias mundialistas.
Con un tono firme y un mensaje claro, el entrenador dejó en evidencia que no hay margen para la relajación: “Vamos poco a poco, como bien has dicho, el primer partido es Belice, luego Nicaragua. Tenemos que ir con todo, con una mentalidad ganadora, con una mentalidad de que respetamos al contrario”, advirtió.
Christiansen, quien goza de contrato hasta junio 2026, destacó que el grupo debe funcionar como un colectivo donde todos estén listos para asumir protagonismo.
“Todos tienen que ser protagonistas en esta selección. Todos tienen que estar listos para sus minutos, sus 90 minutos. Esa es la exigencia que estamos pidiendo a todos los jugadores para que haya una competencia sana”, recalcó.
Al ser consultado sobre posibles cambios en el estilo de juego ante la ausencia de Adalberto Carrasquilla en el mediocampo, el estratega fue claro: no se desviarán del modelo que ha caracterizado a la Roja.

“Si va a cambiar nuestro estilo, pues la verdad es que no. Tenemos jugadores en el mediocampo que pueden reemplazar, hacer un buen papel, y como hemos hecho en otros torneos, darle la oportunidad a otros que estén preparados”, afirmó.
Christiansen también advirtió sobre la necesidad de no subestimar a rivales como Belice y Nicaragua, tomando como ejemplo lo ocurrido hace un año con Guyana y Montserrat.
“Hoy en día el fútbol profesional no es fácil. Si tienes un equipo bien estructurado, defendiendo bien y comprometido, va a costar mucho más”, analizó. “Tenemos que exigir a nuestros jugadores más velocidad, más compromiso, más intensidad en todas las acciones. Y luego estar finos de cara al gol.”
El técnico reconoció que el trabajo táctico ya está interiorizado por la mayoría del plantel, pero ahora el siguiente paso es la fortaleza mental.
“La experiencia, el tiempo que llevamos juntos... eso ya lo tienen. Ahora creo que tenemos que mejorar en el aspecto mental para ser todavía más competitivos”, expresó el hispano-danés.
Con siete sesiones entrenamientos, Christiansen celebró el tiempo que tiene para trabajar con el grupo en Penonomé, una oportunidad que busca aprovechar al máximo con la mira no solo en los duelos ante Belice (7 de junio) y Nicaragua (10 de junio), sino también en la Copa Oro y las siguientes ventanas eliminatorias.
“Quiero dar un paso adelantado a todo lo que me pueda ocurrir, estar precavido. Este tiempo con los jugadores tiene que servir para fortalecer el grupo, los conocimientos, la mentalidad. Si ganamos los dos partidos que vienen, como debemos hacerlo, y luego encaramos la Copa Oro, vamos a aspirar a lo máximo —pero sin perder de vista lo que viene en septiembre, octubre y noviembre.”
La selección nacional continuará dos días más en Penonomé antes de trasladarse a la capital para luego viajar a Belice.

