El legendario receptor panameño Manuel Sanguillén, conocido cariñosamente como “Sangy”, será honrado este sábado 24 de agosto con su inducción al Salón de la Fama de los Piratas de Pittsburgh. Sanguillén, nacido en María Chiquita, provincia de Colón, dejó una marca indeleble en las Grandes Ligas durante sus 13 temporadas, 12 de ellas con los Piratas.
A pesar de llegar “tarde” al béisbol profesional, Sanguillén tuvo una carrera brillante en las Grandes Ligas, destacándose por su habilidad defensiva, su talento con el bate y su carismática personalidad.
Fue el receptor titular de los Piratas el 20 de septiembre de 1969, cuando Bob Moose lanzó un juego sin hits, y fue pieza clave en los equipos de Pittsburgh que ganaron la Serie Mundial en 1971 con Roberto Clemente y en 1979 con sus compatriotas Omar Moreno y Rennie Stenett.
Además, Sanguillén fue seleccionado en tres ocasiones para el Juego de Estrellas y terminó en octavo lugar en la votación para el Premio al Jugador Más Valioso en 1971.
Durante su carrera, Sanguillén participó en 1,448 juegos, acumulando 1,500 hits en 5,062 turnos al bate para un impresionante promedio de bateo de .296. Además, conectó 65 jonrones y remolcó 585 carreras, cifras que reflejan su consistencia y poder en el plato.
His love for the city of Pittsburgh is one of the many incredible things about Manny Sanguillen.
— Pittsburgh Pirates (@Pirates) August 19, 2024
We officially welcome him to the Pirates Hall of Fame on August 24. pic.twitter.com/WmdugHxoU7
Amistad inolvidable
Más allá de sus logros en el campo, la historia de Sanguillén está ligada a la de su amigo cercano y compañero de equipo, el puertorriqueño Roberto Clemente. La profunda amistad entre ambos jugadores es recordada como una de las más emblemáticas en la historia del béisbol.
Uno de los momentos más conmovedores de esta relación ocurrió tras la trágica muerte de Clemente en un accidente aéreo el 31 de diciembre de 1972. Al enterarse de la noticia, Sanguillén, un hombre de profunda fe, no buscó consuelo en la iglesia, sino que se dirigió a Piñones, en la costa noreste de Puerto Rico, cerca del lugar del accidente. Desesperado por ayudar, se unió a un grupo de buzos en la búsqueda de los restos de Clemente, a pesar de no tener experiencia en buceo y de las advertencias sobre las peligrosas condiciones del mar.
“Eso vino de mi corazón”, dijo en su momento Sanguillén, quien se lanzó al agua con un tanque de oxígeno en la espalda, buscando alguna señal de su querido amigo. “Fue genuina su reacción”, comentó Steve Blass, compañero de equipo de Sanguillén, al recordar cómo mientras todos asistían al funeral de Clemente, Sangy estaba en la playa, intentando acercarse lo más posible al lugar de la tragedia.
Two Great Teammates ....Two Great human beings....!!!! Roberto Clemente and Manny Sanguillen....!!!! pic.twitter.com/fF1uzuj0LJ
— Angel Marte at Bar Harbor , Maine 8-22-23. (@AngelMa64249678) February 25, 2023
Un encuentro en el aeropuerto
La amistad entre Sanguillén y Clemente comenzó de una manera inesperada en un aeropuerto de Pittsburgh. Ambos jugadores se encontraban en el mismo vuelo de conexión desde Miami, y aunque Sanguillén aún no había debutado en las Grandes Ligas, ya estaba en el roster de 40 jugadores de los Piratas. Sorprendentemente, Sanguillén había comprado un boleto de primera clase, mientras que Clemente, ya una estrella consolidada, viajaba en segunda.
Clemente, al notar que ambos iban al mismo evento de los Piratas, se ofreció a llevar a Sanguillén al hotel, y al llegar, compartieron la misma habitación. Sanguillén, temiendo invadir la privacidad de Clemente, pidió otro cuarto, un gesto que ahora recuerda con humor. “¿Quién no quiere ser compañero de cuarto de Roberto Clemente?”, comentó Sanguillén entre risas.
Clemente, siempre dispuesto a ayudar a los jugadores latinos, guió a Sanguillén en sus primeros pasos en las Grandes Ligas. Incluso le ayudó a cambiar su pasaje de avión por uno más económico para el viaje de regreso, un gesto que significó mucho para el joven panameño, quien estaba ahorrando todo lo posible para apoyar a su familia en Panamá.


