La Selección de Fútbol de Panamá no ha tenido el arranque esperado en la fase final de las eliminatorias de Concacaf rumbo al Mundial 2026.
Tras igualar 0-0 en su visita a Surinam y empatar 1-1 ante Guatemala, en el estadio Rommel Fernández; la escuadra dirigida por Thomas Christiansen suma apenas dos puntos de seis posibles, quedándose en la tercera posición del grupo.
As it stands in Group A 📊 pic.twitter.com/O7ixJr9VzP
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La tabla, tras dos jornadas, la lidera sorpresivamente Surinam con cuatro unidades, seguido de El Salvador (3 puntos), Panamá (2 puntos) y Guatemala (1 punto). Un panorama que deja a La Roja con la obligación de reaccionar en la doble fecha de octubre para no complicar sus opciones de clasificar.
Carlos Harvey con el remate perfecto 🎯 pic.twitter.com/PvMGutzYt8
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El calendario ofrece retos inmediatos: el 10 de octubre visitará a El Salvador, mientras que cuatro días después recibirá a Surinam en la capital panameña. En noviembre se medirán dos duelos cruciales ante Guatemala de visita (13) y frente a El Salvador en casa (18), antes de cerrar el grupo el mismo día con Guatemala vs Surinam.
Óscar Santis, letal en el area 👊 pic.twitter.com/V2sVMS9AGG
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Escenarios de Panamá
Para la clasificación directa, Panamá debe sumar al menos dos victorias en los próximos cuatro partidos y acompañarlas de empates estratégicos para llegar a 8 o 9 puntos, lo que lo pondría en buena posición. Ganar en casa frente a Surinam y El Salvador luce indispensable para las aspiraciones.
Pero si Panamá solo gana un partido, necesitaría varios empates y esperar tropiezos, por ejemplo, de El Salvador y Surinam. Un cierre con triunfo en casa el 18 de noviembre contra los cuscatlecos podría ser decisivo.
Puntos compartidos 🤝 pic.twitter.com/SzZMuNayjQ
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El riesgo de la eliminación surge con el empate de otros tres partidos que dejaría la selección con 5 puntos, un registro casi insuficiente para avanzar en un grupo tan corto, donde cada victoria pesa el doble. Las cosas se complicarían aún más si sufren derrotas.
Esto demuestra que La Roja ya no tiene margen de error y debe convertir el Rommel Fernández en una fortaleza, si quiere mantener vivo el sueño de repetir en una Copa del Mundo.

