La estadounidense Katie Ledecky agigantó su leyenda y se convirtió en la nadadora con más medallas de oro en la historia de los Juegos Olímpicos, con un total de nueve metales dorados, tras imponerse este sábado en la final de los 800 libre París 2024.
Un triunfo que no sólo confirmó a la norteamericana, que cumplió 27 años el pasado mes de marzo, como la mejor nadadora de todos los tiempos, sino que permitió a Ledecky igualar a la gimnasta soviética Larisa Latynina como la deportista femenina con más oros, nueve cada una, en la historia olímpica.
Toda una proeza que llegó, como no, en los 800 metros, su distancia favorita, la prueba con la que se dio a conocer al mundo con apenas 15 años tras imponerse en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

Un título al que Ledecky sumó un segundo cuatro años más tarde en Río y un tercero, nueve después, en Tokio para contabilizar este sábado en la piscina de La Défense su cuarto oro consecutivo en la distancia.
Gesta que hasta ahora sólo había sido capaz de lograr el legendario Michael Phelps que se impuso de manera sucesiva en las finales de los 200 mariposa de los Juegos de Atenas 2004, Pekín 2008, Londres 2012 y Río 2016.
Bien es cierto que el dominio de Katie Ledecky, plusmarquista universal de la distancia, no es el de antes y que este curso ha visto interrumpida su racha de casi trece años sin conocer la derrota tras perder el pasado mes de febrero ante la canadiense Summer McIntosh, pero su superioridad en la prueba sigue siendo incontestable.

