Yaylagul Ramazanova, arquera de Azerbaiyán, ha capturado la atención del mundo en los Juegos Olímpicos de París 2024, al competir mientras está embarazada de seis meses y medio.
Aunque su participación en la competencia de tiro con arco terminó en los octavos de final, tras ser derrotada por la alemana Michelle Kroppen, la situación de Ramazanova ha sido especialmente notable debido a la visibilidad de su embarazo mientras competía con su arco en mano.
“Sentí a mi bebé patearme antes de disparar esta última flecha. Y luego disparé un 10″, manifestó la deortista de 34 años luego de terminada su participación.
“Las mujeres están disipando el mito de que no se puede hacer ejercicio a un alto nivel cuando se está embarazada”, comentó la doctora Kathryn Ackerman, médica de medicina deportiva y copresidenta del grupo de trabajo sobre la salud de la mujer del Comité Olímpico y Paralímpico de Estados Unidos.
La doctora Ackerman explicó a diversos medios que los médicos ahora recomiendan que, si una atleta está en buenas condiciones antes del embarazo y no hay complicaciones, es seguro hacer ejercicio, entrenar y competir a un nivel muy alto. “Esto es algo que estamos viendo cada vez más”.
Ramazanova no fue la única atleta en París 2024 que participó estando embarazada.
Nada Hafez, esgrimista de Egipto, compitió en la categoría individual femenina de esgrima, embarazada de siete meses quien también logró llegar hasta los octavos de final al ser vencida por la surcoreana Jeon Ha-young.
La participación de Ramazanova y Hafez en los Juegos Olímpicos de París 2024 no solo es un testimonio de su fuerza y determinación, sino también un poderoso mensaje sobre las capacidades y la resistencia de las mujeres.


