El seleccionador de Surinam, Stanley Menzo, reconoció la dificultad que representará enfrentar a Panamá en el arranque de la fase final de las eliminatorias de Concacaf rumbo al Mundial 2026 y aseguró que, aunque la meta siempre es ganar, un empate sería un resultado muy positivo para su equipo.
Surinam se prepara para un desafío mayúsculo este jueves cuando reciba a Panamá en el estadio Franklin Essed de Paramaribo, en lo que será el primer enfrentamiento oficial entre ambas selecciones. En la conferencia de prensa previa al partido, el director técnico Stanley Menzo y el defensor Shaquille Pinas compartieron sus impresiones sobre el compromiso y el momento que vive la escuadra surinamesa.
Menzo, de 61 años, es una de las figuras deportivas más reconocidas del país. Nacido en Paramaribo, fue portero durante una década en el Ajax de Ámsterdam, donde ganó nueve títulos, y estuvo convocado con la selección de Países Bajos para el Mundial de Italia 1990 y la Eurocopa de 1992. Desde 2002 se ha desempeñado como entrenador y actualmente vive su segunda etapa al frente de Surinam.
Consciente de la magnitud del rival, el técnico dejó claro que su equipo no jugará pensando únicamente en el contragolpe.
“Nuestro estilo de juego no es solamente el contraataque. Somos realistas. No creo que podamos dominar a Panamá como podemos hacerlo contra otros equipos. Panamá es una selección que ataca, que busca la posesión, y en ocasiones tendremos que aprovechar los espacios. Pero no es nuestro único plan”, explicó.
El estratega reconoció la calidad del conjunto panameño, al que calificó como uno de los más completos de la región.
“Panamá tiene un plantel fuerte del número 1 al 11. Notamos que incluso jugadores que no estuvieron en la Copa Oro ahora están de regreso y eso los hace todavía más competitivos. Es un rival de primer nivel”, afirmó.
Los futbolistas panameños que vuelven a convocatoria con Adalberto Carrasquilla, Edgar Yoel Bárcenas, Cecilio Waterman y José Fajardo.
A la hora de valorar las opciones de su equipo, Menzo apeló a la prudencia.
“Todo futbolista entra a un partido para ganar. Ese es siempre el punto de partida. Pero hay que ser realistas: ganar a Panamá no será tan sencillo como hacerlo contra Puerto Rico, por poner un ejemplo. Si no se puede ganar, entonces lo importante es no perder. En ese caso, un empate sería fantástico”, señaló, dejando la frase que marcó la conferencia.
Por su parte, Shaquille Pinas, de 27 años, es uno de los líderes del vestuario surinamés. Nacido en Rotterdam, se formó en Feyenoord antes de iniciar una carrera internacional que lo llevó a Bulgaria con Ludogorets, luego a Suecia con Hammarby y más recientemente a Arabia Saudí, donde acaba de fichar por Al-Kholood. Debutó con Surinam en marzo de 2021 y desde entonces acumula 29 partidos y cuatro goles.
Pinas admitió que la constante rotación de futbolistas en la selección ha sido un reto, aunque mantiene intacta su motivación.
“Siempre es más fácil trabajar con un grupo fijo, pero los cambios son inevitables. Lo importante es que cada vez que vengo me siento orgulloso de representar a Surinam. Esa emoción no cambia, y eso también facilita la labor del cuerpo técnico”, expresó.
El defensa destacó además el significado del momento que atraviesa el equipo en el camino hacia un Mundial.
“Esta es la fase más importante de mi carrera. Poder soñar con llevar a Surinam a una Copa del Mundo es algo que motiva muchísimo. No quiero mirar demasiado adelante, pero sí dar todo partido a partido. Espero que mañana el estadio esté lleno y la gente nos apoye, porque eso nos da energía”, dijo.
Surinam llega a esta etapa tras haber competido en la fase de grupos de la Copa Oro 2023, donde se midió a Costa Rica, República Dominicana y México.
