WASHINGTON, Estados Unidos. (REUTERS). -Los líderes financieros del Grupo de las 20 grandes economías se reunieron el viernes para debatir objetivos específicos para contener los niveles de deuda y los peligros potenciales de las últimas rondas de estímulo monetario de los mayores bancos centrales del mundo.
Los jefes de Finanzas también demandarían una rápida resolución a la fijación de guías para los instrumentos financieros referenciales como la tasa de interés Libor, tras el escándalo global por la manipulación de esos tipos. Sin embargo, la revisión de las medidas de austeridad de las mayores economías sería uno de los principales temas.
Las economías avanzadas, en especial en Europa, han llevado adelante fuertes planes de recortes de gastos para limitar su endeudamiento, pero esos esfuerzos han golpeado a sus economías, que ya sufrían por una fuga de capitales y subinversión delsector privado.
El comisionado de Asuntos Económicos y Monetarios de la Unión Europea, Olli Rehn, le dijo a Reuters en una entrevista que era necesario un periodo de menores gastos y endeudamiento para calmar a los mercados, alarmados por los descontrolados niveles de deuda de varios países, en especial de la periferia de la zona euro.
Pero ese momento ya ha pasado, agregó. "Se tomaron medidas decisivas. Ahora, tenemos que restaurarla credibilidad de corto plazo, que nos da la posibilidad detener un camino más suave de ajuste fiscal en el mediano plazo", agregó.
Entre otros temas, los ministros de Finanzas del G-20 discutían si deberían o no establecerse metas numéricas para la reducción de deuda. Estados Unidos y Japón se han opuesto a comprometerse a un objetivo de deuda pública como porcentaje del PIB, pero Rusia-que este año preside el G-20- tiene esperanzas de asegurar un acuerdo sobre las metas cuando el grupo se reúna en San Petersburgo en septiembre.

