La industria aérea de Colombia sigue sufriendo el lastre de la crisis de económica y financiera y de los efectos adversos de una desaceleración, altos costos del combustible, financiamiento y devaluación de la moneda. Esta vez le tocó el turno a la aerolínea de bajo costo Ultra Air que no logró salir a flote a un año de estar operando, y anunció la suspensión de todos sus vuelos y actividades desde hoy 30 de marzo.
“Lamentamos profundamente informar a todos nuestros clientes, proveedores y autoridades que, a partir de hoy [ayer] en la noche a las 12:00 a.m., se suspende la operación de la aerolínea Ultra Air en Colombia, por lo cual no volará en ninguna de sus rutas programadas a partir del 30 de marzo”, indicó la empresa en comunicado enviado a los medios.
Indican que hace un año iniciaron operación para atender el mercado con vuelos de bajo costo y durante ese tiempo lograron transportar a más de 2 millones de pasajeros .
Ultra Air llegó a tener 8% de participación del mercado aéreo colombiano y generó cerca de 1,200 puestos de trabajo directos e indirectos.
“Sin embargo, situaciones macroeconómicas adversas para la industria como el incremento en el costo del combustible y la tasa de cambio, generaron un alza sustancial de costos para las aerolíneas, lo que conllevó a operar deficitariamente durante los últimos meses”, admite la compañía.
Apenas hace unas semanas se había firmado una carta de entendimiento para que la chilena Jetsmart comprara Ultra Air, pero a los pocos días declinó la intención de compra, dejando a la colombiana sin opciones para seguir operando.
La crisis de Ultra Air se suma a la que se produjo con la otra aerolínea de bajo costo Viva Air que suspendía varios de sus vuelos y atribuía la decisión a que las autoridades aeronáuticas no habían dado una respuesta rápida a la fusión con Avianca.
Porteriormente Viva y Avianca recibieron el visto bueno para su fusión bajo ciertas condiciones por parte de la autoridad de Aeronáutica Civil de Colombia, pero desde Avianca indican que aun no se han integrado pues la aprobación no es firme y pesa sobre el proceso más dudas y el temor a apelaciones y oposición.
La crisis de las aerolíneas de bajo costo deja una estela de incertidumbre sobre la renbilidad de las aerolíneas en el mercado colombiano que sigue dejando en tierra a otra compañía en uno de los mercados aéreos de mayor demanda y tráfico de pasajeros domésticos con 32 millones de viajeros nacionales en 2022.
Quedan en la competencia de aerolíneas de bajo costo la colombo panameña Wingo, de Copa Holdings, pero opera principalmente vuelos internacionales hacia el Caribe y pocos domésticos. Ahora pide pista para aprovechar la ausencia de jugadores domésticos, la aerolínea de Chile Jetsmart.
Avianca y Latam han tratado de cambiar su modelo de negocio para ofrecer opciones de bajo costo en la oferta de asientos que tienen en sus rutas domésticas en Colombia, pero el mercado aéreo de ese país pierde ahora con la salida de Ultra Air y la incertidumbre operativa de Viva Air.


