La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) recomendó este martes 12 de mayo dar un ingreso básico de emergencia (IBE) a las personas más vulnerables o pobres de la región que han sido afectadas por la pandemia de Covid-19 y que equivale a una mensualidad de 143 dólares.
En conferencia de prensa virtual, la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena dijo que con un monto mensual de 143 dólares se cubriría la canasta básica de alimentos y otras necesidades, y representaría el 1.7% del producto interno bruto (PIB) en tres meses y 3.4% del PIB en seis meses.
"Los gobiernos deben garantizar transferencias monetarias temporales para satisfacer las necesidades básicas y sostener los consumos de los hogares, esta es la salida porque no hay actividad económica", dijo Bárcena en el tercer informe que ofrece sobre la pandemia.
Si se compara con el bono de $80 que actualmente entrega Panamá a los afectados por falta de ingresos debido a la cuarentena por Covid-19, se trata de $63 dólares adicionales.
En febrero pasado, en Panamá la canasta básica de alimentos con 59 productos para 3.5 personas era de 310 dólares.
De acuerdo con los estudios del organismo de las Naciones Unidas, como consecuencia de la pandemia, la pobreza en América Latina aumentará de 186 millones de personas en 2019 a 214 millones en 2020, y la pobreza extrema de 67 millones de individuos el año pasado a 83 millones este año.
Se trata de 28.7 millones más de pobres que en 2019 que particularmente destacan en Honduras, Guatemala, México y El Salvador. Con la pandemia se suman más pobres en Argentina, Brasil, Ecuador, México y Nicaragua.
Bárcena recalcó la importancia de establecer estos programas de ayuda a los más pobres "porque esta pandemia va a durar y va a ser larga".
Recordó que un 53% de los trabajadores de la región pertenecen al sector informal que no paga cuota de seguridad social ni está recibiendo ingresos por la paralización de las actividades.
Una de las opciones para cubrir estos gastos sería echarle mano a la evasión fiscal que se calcula en 6.3% del PIB en la región, dijo.
Destacó que el efecto de la pandemi significa 13 años de retroceso en los niveles de pobreza en la región.
Se necesita abrir el espacio fiscal para incrementar los ingresos fortaleciendo impuestos a la renta personal y sobretodo a los más ricos, ademas de revaluar los incentivos tributarios que le cuestan a la región 3.7% del PIB para que estos dineros se destinen a la necesidad social.
Hay 29 países de la región que han aplicado hasta la fecha 126 medidas de protección social para la población pobre haciendo transferencias monetarias o de alimentos.


