Las autoridades investigan las causas del derrame de aproximadamente 32 barriles de IFO 380 (1,344 galones de mezcla de combustibles destilados y residuales) en la madrugada del pasado 30 de junio, en el muelle sur de la empresa Petroamérica Terminal, S.A. (Patsa), que tiene sus operaciones en Rodman, en el Pacífico.
La Autoridad Marítima de Panamá (AMP) informó que el derrame se dio cuando la embarcación de suministro de combustible Sea Lion, de bandera panameña, con número IMO 7715422, vertió el combustible en el área del muelle.
La AMP dijo que tras el suceso se activó una comisión establecida por resolución, para imponer una sanción al causante del derrame, luego que un equipo evaluó en el área las afectaciones ocasionadas al medio ambiente.
Indicó que hasta el momento dicha investigación ofrece indicios de que posiblemente el incidente se trató por un error humano, sin embargo, no ofreció más detalles.
En cuanto ocurrió el derrame, personal de la terminal y de la embarcación activaron sus planes de contingencia, desplegando las barreras de contención adicional; además, la compañía propietaria de la nave y personal de la terminal llamaron a las empresas autorizadas para limpieza de derrames.
Para la limpieza, la AMP informó que también desplegó el personal del departamento de Prevención y Control de la Contaminación, de la Dirección General de Puertos e Industrias Marítimas Auxiliares.
Por su parte, el Ministerio de Ambiente también informó a este diario que técnicos de la Dirección Regional de Panamá Oeste realizaron una inspección en el muelle 2 del puerto Rodman, luego de recibir el reporte por derrame de hidrocarburo.
Al llegar al lugar, cerca del 90% del combustible ya había sido recogido y almacenado por las empresas Ocean Pollution Control y Talleres Industriales, quedando solamente el 10% restante, por lo que personal del Ministerio se mantuvo en el área para verificar que se cumpliera con las medidas de limpieza del porcentaje que hacía falta recoger.
De igual manera, el Ministerio de Ambiente informó que antes del suministro del combustible a la barcaza, la empresa Patsa coloca una barrera de contención, para controlar o contener cualquier derrame imprevisto, lo que impidió que al momento de ocurrir el incidente hubiera mayores repercusiones en las áreas marinas adyacentes.
El Ministerio de Ambiente también dijo que iniciaría las investigaciones para determinar la cantidad de combustible vertido, las medidas de mitigación y sanciones que correspondan, según la gravedad del daño ocasionado.
Las organizaciones ambientales han exigido que se imponga una multa ejemplar al responsable por los daños ambientales que esto causa en la fauna y flora marina.
