La plataforma de producción y distribución de música y pódcast en ‘streaming’ Spotify cerró el primer trimestre de 2023 con unas pérdidas netas de 225 millones de euros, frente a las ganancias de 131 millones de euros observadas en el mismo periodo de 2022, según se desprende de la cuenta de resultados que ha publicado este martes la empresa.
Los ingresos crecieron un 14.3%, hasta alcanzar los 3.042 millones de euros, al tiempo que los costes asociados a los ingresos, derivados en gran medida de los derechos de autor que Spotify tiene que pagar a artistas y discográficas, se encarecieron un 14.4%, hasta los 2.276 millones de euros.
No obstante, el resto de gastos fruto de I+D, ventas, marketing, generales y administrativos se redujeron un 10.7%, y se quedaron en 922 millones de euros.
Del total de la facturación, 2.713 millones de euros procedieron de las suscripciones de usuarios ‘premium’, un 14% más, mientras que otros 329 millones de euros resultaron de la publicidad servida a los usuarios que usan gratuitamente el servicio, un 17% más.
El número total de usuarios entre enero y marzo fue de 515 millones, un 22% más. Los suscriptores ‘premium’ crecieron un 15%, hasta los 210 millones, liderando los mercados europeos y latinoamericano, al tiempo que los usuarios gratuitos avanzaron un 26%, hasta los 317 millones.
Spotify anticipa, de cara al segundo trimestre de 2023, que aumentará a 530 millones los usuarios activos, a 217 millones de usuarios ‘premium’, y tendrá unos ingresos totales de 3,200 millones de euros.
